martes, 14 de septiembre de 2010

27




El armario sin tus prendas no se viste igual que antaño.
Los grillos me cantan su melodía melancólica.
Ella abunda como carezco de vino.
Y yo contando las horas y los latidos.

Las telarañas extrañan que las quites de mi rostro.
Ustedes, sombras, tejidas en mi alma alcohólica
tienen la responsabilidad que convido.
Y yo, contando las horas y los latidos.

Fue un jueves mojado amaneciendo a sábado
a pedir asilo en luz metafórica.
Flama vuelve, va y vino.
Y yo contando las horas y los latidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Extracto Mar y Niebla

  Por entre las nubes vaga un beso de tu boca dulce y enamorada. Mi lengua pide un poco de rocío, de lluvia; pide toda la miel desde t...