martes, 25 de noviembre de 2014

Autorretrato


Oyes My funny valentine, con Chet Baker (Unissued version), es de noche, la niebla comienza a cubrir literalmente la ciudad, de poco a poco, de forma visible, y sabes que consona con el sentir. El flujo de los días, hasta el presente, han sido destapados de las botellas. Similar a tomar por el filo la navaja, es cuando ves las circunstancias desde otro ángulo. Te hiere. Surge la sangre.
Te has reinventado tras cada muerte. Desde la primera resurrección el candado del olvido a los números seriales procuró desaciertos. 
Puede que no existan más letras,vocablos, verbos, o que sólo termines Lonsdaleite y el Archivo. Mas ambos, todos, sabemos que el éter, la adrenalina, el alcohol y el fuego harán una hoguera memorable.

miércoles, 19 de noviembre de 2014

Extracto: Archivo: André Lovedy Estatus: Desclasificado



-¿Oyes cómo las gotas golpean el vidrio?
-Me gusta-. Vestido por completo, acercó una mano a ella sobre su cabello rubio.
-No has comentado nada de mi nariz-. André siguió contemplando hacia el frente y Collins dijo-: Te lo agradezco.
-¿Cuándo pasó?
-Me operé un año después de vernos por última vez.
Sin embargo él ya había notado que la nariz aguileña fue sustituida por una más recta y bella.
-Ah…
-André, ¿porqué siempre te quedas ido?- añadía tras un silencio largo.
-¿De qué hablas?
-De repente es como si tu mente se fuera de la habitación donde se encuentra tu cuerpo. Es algo que sólo en ti he visto. No te preocupes, ya me acostumbré desde que estuve en tu casa… sin ese lapsus desconfiaría de ti, de que seas el mismo.
-Supongo que a veces me pasa.
-Pero… ¿Porqué?
Mas André no supo qué responder. Sentía que ella era honesta, que hablaba de una situación a la que ya se había aclimatado pero que desconocía su procedencia.
-Violeta, así déjalo… Oye… prefiero el Lago de los cisnes, a El Cascanueces.
-No sé tanto de música clásica. Quien me lo inculcó solía beber oyendo eso, y… no sé, es agradable, me solía contar lo que le venía a la mente, sus imaginaciones… y pues se me quedó. Son de esas cosas que a uno se le pegan y sigue haciendo como para recordar a las personas que se lo enseñaron.
-Como el vino español…
-Sí… Ahora, por inercia, suelo poner un disco así antes de dormir o cuando bebo, y eres sinónimo de ambos verbos.
-¿Dormir?
-Más bien beber y la cama.
Sin preámbulo rieron en un sostenido toque de violines que se dejó escuchar proveniente del estéreo.
-Me gusta cómo hablas ahora…
-Lo sé, ya no más asegunes o dijistes.
-Oye, ¿esta casa es tuya o de tu…?
-Amor, como bien me enseñaste, eso de casada, novia, querida, no es algo a lo que le dé importancia, si no a si es compañero de vida, o no. Así que… Mira, esto que ves, lo que llamas mi casa, lo he logrado de poco a poco y aún me falta. No siempre seré joven y hermosa.
“Un hombre puede tener riqueza, poder y valor, tanto como a una mujer le pertenece su belleza y astucia- pensaba André-. Cada uno de ellos sabe que lo perderá, o al menos, disminuirá en gran medida con el tiempo, por eso tratan de retenerlos a toda costa”.
Luego expresó:
-¿Conoces una pintura llamada Mujer…?
-Fértil... Sé cuál es... ¿Por qué lo preguntas, André?
-Pertenece a un cliente, y él la compró a tu amigo diseñador de modas, Lupercio Machado.
-Entiendo ahora. Por eso fuiste a conocerlo a su evento… Digamos que no es mi amigo amigo; más bien es cliente.
-Ya que no pudiste conseguirme un pase, tengo que abordarlo en cuanto salga de ahí.
-Lo siento, Amor.

-¿Sabes dónde la adquirió?

lunes, 10 de noviembre de 2014

Freno del tiempo




Habías dormido tantos lunes
      que las líneas de la costa se aclararon
 el freno del tiempo atrapó tu mirada
                tu aliento, cada cauce de silencio.
           Aun evoco la lenta mañana que en tu mano
                                      amaneció la alianza tras dos años.

sábado, 8 de noviembre de 2014

Quizá (the awaiting priest)



Quizá, la palabra perfecta
para describirte:
Cúmulo de recuerdos unidos a tu anagrama
supuestos con todo incluido
metáfora intacta
la sinagoga sin muros
y un efluvio constante de boleros.
La marea nos inundaba
no quedó resquicio sin tocar,
su oleaje arrasó las tinieblas:
Yo te pienso, yo te pienso.

Quizá, la palabra indestructible
tatuada a nuestra historia:
Hubo tiempos que de la mano caminé con la muerte,
fue brújula intemporal de mi sombra.
Me faltó el aire en tu presencia,
y tu ausencia hizo que el viento me llevara:
Yo te pienso, yo te pienso.

Quizá, este otoño
sea como cada año:
El pozo lleno, le mesa puesta y el café servido
aguardan la llegada del periódico.
Yo te pienso, yo te pienso.

Quizá dormimos
y te desperté:
Visto la armadura con que me conociste
su tacto suave y el color negro
perduran
                      protegen
privan los efectos de tu lanza:
Yo te pienso.
Yo te pienso.

Quizá, tu significado
sea incierto:
Acallo los augurios que me preceden,
recibo golpes y me levanto,
sabes que ningún panteón podrá tenerme.
Yo te pienso, yo
te pienso.

Quizá, es tan pequeño el mundo
como para encerrarlo en un anillo.

Quizá el tal vez del sin embargo
alcance la oportunidad.

Quizá las pesadillas forman parte de los sueños
y en sándalo, se curan las heridas:
De noche los retratos cobran vida,
bajo lluvia el alba se alza,
mis suspiros te pertenecen
cada vez que te pienso.

Extracto Mar y Niebla

  Por entre las nubes vaga un beso de tu boca dulce y enamorada. Mi lengua pide un poco de rocío, de lluvia; pide toda la miel desde t...